Por: Kurt Bendfeldt / Presidente de Educando mi País
En los últimos 24 meses de trabajo diario, donde el cansancio es alegre, motivante, entusiasta y donde pensamos todos los días en que podremos cambiar el futuro de la educación al más necesitado, con trasparencia y empeño, además de los esfuerzos constantes por encontrar empresas y empresarios de buena y sana voluntad que nos apoyen con valentía y amor por el país. Lamentablemente, esto último, no es algo que se dé en Guatemala.
¿Por qué hacer las cosas bien cuestan tanto?
¿Por qué el no hacer trampa es tan malo?
¿Por qué el querer un mejor país duele?
¿Por qué el pedir ayuda es malo?
¿Por qué ver la educación como un negocio?
Y miles de cientos de preguntas más…
Educando Mi País, nació con el espíritu de poder hacer las cosas bien, sin pagar comisiones. Sesgar la educación vendiendo los principios para poder conseguir los fondos necesarios, no es parte de nuestra visión.
Un proyecto de nación para nuestros chapines, desarrollado y hecho con amor. Todos dicen “me sumo”, pero en palabras, nadie lo hace con el valor, a todos les encanta nuestro formato, pero tampoco tenemos la repercusión.
Nuestro compromiso es seguir luchando, esforzándonos por los que no tienen el acceso, seguiremos haciendo todo lo que se encuentre a nuestro alcance siempre con la mejor ética y honestidad.
Educando Mi País es la plataforma más grande que se ha desarrollado para la educación no solo para Guatemala sino para la región, y aunque tengamos que tocar miles de puertas más, estamos seguros que una de ellas nos dará el apoyo y soporte necesario para que TRACEMOS EL FUTURO DE LA EDUCACIÓN.